greyhill review

Greyhill Incident Análisis para PS5: ¿Merece la pena? – Review

Los alienígenas nos invaden en este breve título de sigilo cuya mejor cualidad es su atmósfera, importada de la conocida cinta de suspense de M. Night Shyamalan ‘Señales’

Para los amantes de la ufología, 2023 pasará a la historia como un año clave por las declaraciones del ex-oficial de inteligencia D. Grusch, en las que afirmaba que los avistamientos ovnis “no son raros ni aislados”, mientras acusaba al Pentágono de ocultar restos biológicos alienígenas en un testimonio bajo juramento. Casi nada. Una controversia de la que se han hecho eco los medios de comunicación por todo el planeta, resucitando el interés por el fenómeno extraterrestre y propiciando, por extensión, un contexto inmejorable para cine (ahí están los datazos de audiencia de Nadie te salvará), televisión y videojuegos de esta temática. Sin embargo, Greyhill Incident, aun con todo el tino del mundo por su fecha de lanzamiento -en plena polémica-, no ha sabido sacarle todo el jugo a su propuesta como veremos en el siguiente análisis.

La producción de Refugium Games, distribuida en físico por Meridiem Games para PlayStation 4 y PlayStation 5 a un precio de 30€, comete numerosos errores propios de un estudio novel, y deja a Greyhill Incident como un título curioso pero bastante mejorable, recomendado sólo para fans incondicionales de Expediente X y el maestro Enrique de Vicente, por ser quienes sabrán sacarle más chicha al conjunto.

Ultimátum a Greyhill

Sí me gustaría empezar este Greyhill Incident: Análisis aclarando que no todo es negativo en el conjunto. Lo mejor lo encontramos en su cinematográfica puesta en escena, manifiestamente inspirada en el taquillazo Señales de M. Night Shyamalan, la séptima película con mayor recaudación mundial de 2002.

De hecho, Greyhill Incident arranca como un largometraje al uso, con sus rótulos y sus starring, written by y demás, para meternos en su ambiente peliculero desde el minuto uno. El plano de introducción se cierra en la casa del protagonista, Ryan, que está hablando por walkie-talkie con un vecino acerca de los numerosos avistamientos y los rumores que circulan por el pueblo. Enseguida entra el inevitable tutorial, que nos deja claro que estamos en un título de sigilo en primera persona, al presentarnos cómo introducirnos en los recovecos donde tocará esconderse.

Para defendernos dispondremos de bates de béisbol (que los dejan momentáneamente inconscientes) así como de armas de contadísima munición (tanta que al final queda en una anécdota y nos centraremos en el uso y abuso del sigilo). Para huir, tendremos un botón específico cuyo uso también será limitado, debiendo esperar que se rellene un indicador y volver a echarnos a correr.

Conforme se desarrolla el tutorial, la dirección artística nos deja ver la decoración de la habitación, haciéndonos saber que estamos en plenos años 90 (concretamente en mayo del 92) no sólo con el almanaque, sino a través de los numerosos detalles que encontraremos a lo largo de todo el juego. Entre ellos, un cubo de Rubik, un Space Invaders a modo de guiño a los retrojugones y una tele de tubo desde la que el telediario informa de formaciones de luces en el cielo…

¿Os suena esa escena? Seguro que sí. Muchos momentos icónicos de Señales están adaptados en Greyhill Incident, como por ejemplo los sombreritos en forma de cono hechos con papel de aluminio -como los que Joaquin Phoenix termina poniéndose en la película-, o la linterna que necesita recarga manual. Incluso un niño dibujará un alienígena camuflándose entre un maizal, reproduciendo otra de las secuencias más memorables del film.

Y es que claro, la invasión alienígena podría haber estado protagonizada por escoceses en sus campiñas pero, cómo no, Greyhill se ubica en un condado norteamericano plagado de campos de maíz, idénticos a los que Mel Gibson inspeccionaba buscando invasores.

Es esta sensación de buscar una fidelidad cinematográfica lo que mejor funciona en Greyhill Incident. El apartado visual es solvente, y al ambientarse de noche, disimula sus limitaciones presupuestarias tirando de oscuridad y juegos de luces y sombras realistas y vistosos. El diseño de personajes, por su parte, cumple sin más tanto artística como técnicamente, con unas animaciones faciales sencillas. Por su parte, el doblaje (en inglés) no destaca ni para bien ni para mal, mientras que la banda sonora prácticamente es inexistente, dejando todo el peso del apartado sonoro en los FX.

Los vecinos de Greyhill Incident tienen claras sus prioridades

En general, no es un desastre audiovisual y, como insisto, es el punto de apoyo de una ambientación lograda. Honestamente quizá la sobrevalore si la analizo en frío, pero es por ser el elemento que queda tan notablemente por encima del resto.

Greyhill Incident: Análisis de sus dinámicas de juego

En todo lo demás, el juego es un intento fallido de formular un survival horror de categoría con los alienígenas como telón de fondo. Y es una pena, porque potencial tenía y la temática da mucho de sí.

Está planteado, salvando las distancias, como un Outlast en el que cambiamos los maníacos del sanatorio por unos ETs con muchísima mala leche. Tardarán en aparecer físicamente, para generar más impacto, y ciertamente los primeros encuentros funcionan a la hora de crear picos de tensión, pero cuando les ves infalibles a la hora de dar contigo y que prácticamente siempre van a localizarte (con unos escondites que no sirven de mucho), Greyhill Incident se convierte en un juego de ensayo-y-error torpe y del montón.

No tenemos radares, mapas… La pantalla está prácticamente limpia de información y datos, y eso facilita la inmersión. No discuto que contribuye a meternos en la piel del protagonista a la búsqueda de su hijo, abducido al comienzo del juego, compartiendo sus dificultades y haciendo frente a los mismos peligros con los mismos recursos. Esto, bien ejecutado, hubiese sido un tanto a favor.

Pero no hay que perder de perspectiva que estamos en un videojuego y que, por tanto, ha de ser lo primero de todo divertido. Y tratar de pasar por una zona donde no sabes por dónde te va a salir un grisecillo, una y otra vez, se hace tedioso y poco entretenido. Sobre todo cuando el punto de control -impuesto por el juego, no puedes salvar partida cuando quieras tú– te coloca en un momento muy anterior a ese área y tienes que repetir lo mismo varias veces hasta que, por una cuestión de aleatoriedad, pases desapercibido y llegues a tu objetivo.

Porque ése es otro detalle. La inteligencia artificial de los marcianitos es un sinsentido. He abierto una puerta y me he encontrado de golpe, cachete con cachete, con uno y el cabezón se ha dado la vuelta y se ha puesto a husmear la cocina como si tal cosa. En cambio, otras veces, en las secciones donde tienes que cruzar maizales y prados, los he visto tirar a todo trapo hacia mí estando a unas distancias enormes y convenientemente escondido. No hay lógica ninguna.

Como tampoco la hay en que el protagonista sea incapaz de subir un seto de cincuenta centímetros o una pequeña valla para acortar distancias entre zonas. Greyhill Incident divide su desarrollo en secciones que incomunica entre sí, dejando la impresión de que todo está excesivamente encorsetado. Hay muchas maneras de disimular un desarrollo lineal donde todo está guiado al milímetro, pero no se recurre a ninguna.

Pese a este ritmo tan forzado y tan impuesto, Greyhill Incident también quiere jugar al despiste y te suelta en esas zonas sin apenas información, muchísimas veces. Si pulsas el botón de pausar, te encontrarás con mensajes -en español, eso sí- que indican en qué misión estás y qué tienes que hacer, siendo tan útiles como: “Dirígete a la casa de Bob”. Genial, dígame cuál puñetas es la casa de Bob en una calle a oscuras llena de otras tantas cerradas y todas iguales, si no tengo indicaciones ni mapa ni nada. A todo esto, hablando de botones, hay dos para realizar acciones muy similares, lo que también puede provocar confusión y esto, en momentos donde buscamos escondite, tampoco ayuda.

Otro de los fallos que he encontrado es el tiempo de recarga de las habilidades de golpear y correr. Entiendo que le da un punto de realismo a las dinámicas de juego no tener un personaje que va dando zancadas ilimitadamente, pero nuevamente juega en contra de la capacidad de divertir. Cuando tu única posibilidad de no ir al Game Over después de que te vea un alienígena es salir por patas, no tiene sentido que a los pocos pasos nos quedemos sin poder esprintar.

En resumen, Greyhill Incident buscaba fórmulas y recursos ya conocidos para crear su propio título de suspense, pero los fusiona de manera poco acertada y acaba por ofrecer un título que abusa de la repetición y de la paciencia del jugador, al que tampoco recompensa con un guion distraído o, como mínimo, bien resuelto.

Greyhill Incident Análisis: Conclusiones

Pese a los desaciertos de Greyhill Incident, puede ser una opción aconsejable estando muy muy muy barato de precio (insisto en el muy barato) entre los parroquianos de Cuarto Milenio y todos los forofos -en los que me incluyo- que disfruta con Expediente X, La cuarta fase, Independence Day, La Quinta Ola, La Guerra de los Mundos y, en general, la temática de invasores extraterrestres.

Tiene pasajes que defiende bien y que salvan al conjunto de la ponzoña absoluta, pero es cierto que hay que poner mucho de tu parte y ser muy fanático de la temática para pasar por alto los lastres de la producción.

Desde luego, ningún otro videojuego sabe captar la atmósfera y la premisa de Señales como éste, lo cual ya es un aliciente. Además, presenta una duración corta, de alrededor de tres horas, que puede interesar a usuarios que busquen un título ligero para una noche de miedo (si bien Greyhill Incident tiene más de suspense que de terror como tal).

Sin embargo, a la hora de comprarlo hay que tener en cuenta todas sus carencias y fallos de gameplay. El género de sigilo ofrece títulos de muchísima calidad a estas alturas, aunque en ninguno más nos dejan ponernos un gorrito de aluminio.


Enlaces de interés

Sergio Díaz
Estoy en

Deja un comentario

error: Content is protected !!

Descubre más desde Videojuerguistas

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo