Un indie totalmente diferente que apuesta por los objetos personales como original método narrativo
Seguro que has pasado alguna vez por una mudanza… y seguro que te trae recuerdos del Vietnam. Todo el proceso de envolver objetos, buscar una caja donde guardarlos y hacer que entren cuantos más mejor, protegerlos bien, volver a sacarlos, colocarlos… Sabemos de sobra hasta qué punto puede ser estresante.
Woody Allen dijo una vez: “Hace quince años que voy al psicoanalista. Un año más, y viajo a Lourdes…”. Es fácil que el célebre cineasta te arranque una carcajada con ácidos comentarios sobre terapeutas, tan frecuentes en su filmografía. Aunque con ellos contribuya a perpetuar tópicos en torno a una disciplina que, poco a poco, ha ido consolidándose en la sociedad.