[Análisis] The Happyhills Homicide 2 Out for Blood, píxeles sin censura
El slasher narrativo hecho píxel art lanza secuela, pero ¿cumple las expectativas?
The Happyhills Homicide 2
Desarrollador: Copperbolt
Género: Aventura narrativa
Plataforma: PC (Steam)
Idioma: Textos en inglés
Duración (aproximada): 4-5 horas
PRECIO: 2,99 €
Los que me leáis habitualmente, sabréis que me gustó bastante The Happyhills Homicide, un título con mucha carga gore y humor negro desarrollado por Copperbolt. En este análisis de The Happyhills Homicide 2: Out For Blood os comentaré qué me ha parecido esta secuela y si ha estado a la altura de las expectativas.
¡Dentro cuchillos!
Bajo las normas del slasher y sus secuelas
Es inevitable pensar en los monólogos de Randy Meeks o Mindy Meeks cuando explican las reglas del slasher o las aplican a sus secuelas. En un videojuego slasher no iba a ser distinto, así que The Happyhills Homicide 2 Out For Blood es una propuesta formal que las cumple todas.
En primer lugar, tenemos más muertes y son más creativas y sangrientas. El body count aumenta hasta tal punto que le sacaría una lágrima de emoción a los buenos de Jason Voorhees, Michael Myers o Art the Clown. Si vas a hacer una secuela, debes ofrecer más asesinatos. Y más creativos, que salpiquen la pantalla y satisfagan a los amantes de la hemoglobina en cantidades industriales —me incluyo—. Por suerte, aquí tenemos muchas dosis sangrientas para satisfacer esta demanda.
La narrativa se amplía y ahonda en el trasfondo del villano y de los héroes —o antihéroes— que se enfrentarán a él. Esta construcción del antagonista en el subgénero está presente en los slashers ochenteros. Copperbolt se ha inspirado en los clásicos para construir la historia del asesino. Una trama tan increíble como satisfactoria para los amantes de Noche de paz, noche de muerte, Viernes 13 o The Burning.
Más variedad, mayor brutalidad
Otro aspecto innovador con respecto a su predecesor es la introducción de más personajes. Cada uno de ellos tiene una jugabilidad distinta.
Con el detective Pawalski tendremos la parte de investigación. Nuestra labor es investigar cada escena del crimen y recabar pruebas. Podemos usar luminol para descubrir pistas, algo que no estaba en el primer título y que viene como novedad en la secuela. Quizás sea la parte menos entretenida en comparación con los otros dos, pero nos da una perspectiva distinta y nos muestra un poco más de trasfondo en su personaje.
Tenemos al señor Carpenter, el padre de Madison, la chica del primer videojuego. Su jugabilidad es una especie de John Wick que quiere llegar hasta John Wade para vengar a su retoño. Aquí hay casquería pura y acción. También momentos donde elegiremos salvar o condenar una vida. Con Carpenter y Pawalski se produce una divertida sinergia jugable donde los personajes rompen la cuarta pared y nos dan una graciosa escena metalingüística. Ya lo descubriréis.
Por último, vuelve nuestro amado John Wade. Sigue siendo tan sanguinario como en el primero, aunque se nota cierta reiteración en algunos asesinatos. Esto es normal y no significa que no haya originalidad. En The Happyhills Homicide 2 Out For Blood tenemos ejecuciones creativas y variadas. Y mayor sigilo, ya que John Wade se ha vuelto más precavido antes de soltar toda su imaginería sanguinolenta.
En esta secuela fin conoceremos su historia. Unos giros de guion interesantes que evocan a un híbrido de los Michael Myers de John Carpenter y Rob Zombie con Billy Chapman de Silent Night, Deadly Night (Noche de paz, noche de muerte). También hay retazos de Freddy Krueger.
En definitiva, la jugabilidad introduce las suficientes novedades para no ser una secuela conservadora en exceso. Más quick time events, rompecabezas y sangre, mucha sangre.
Sangre y ejecuciones en sprites
The Happyhills Homicide 2 Out For Blood continúa con el estilo pixel art y desplazamiento lateral que caracteriza a los videojuegos de Copperbolt. Incluso lo mejora en esta ocasión.
En esta secuela los sprites tienen mayor nivel de detalle y dinamismo, algo que las escenas violentas sacan mucho partido. Es un buen trabajo del desarrollador en crear buenas secuencias y ofrecer al jugador una cantidad considerable de hemoglobina y asesinatos explícitos. Una declaración romántica al slasher de serie B con toques de grindhouse a lo Terrifier o Hatchet.
Duración
Estamos ante un videojuego corto de terror. Esta aventura narrativa nos tendrá pegados a la pantalla una duración aproximada de cuatro horas. Está dividida en varios episodios que rinden homenaje a películas clásicas de terror o irónicos juegos de palabras.
Por último, cada escenario destila amor por el subgénero. Carteles, pósteres, disfraces y otros elementos decorativos rinden homenaje a las películas que muchos de nosotros amamos. Desde el principio hasta el final, grita un orgulloso «¡larga vida al slasher!».
Conclusiones
The Happyhills Homicide 2 Out For Blood es una disfrutable secuela que introduce nuevos elementos y mejora los conocidos. Una historia de puro slasher de serie B que hará las delicias de todos los que consumen este subgénero. Por el precio que tiene y lo que ofrece creo que es una apuesta más que recomendable.
Nota
7.6
Alex Marsalo lleva su entusiasmo por el slasher y Halloween a su faceta como redactor y escritor, publicando la novela SLASH: Diario de dos asesinos novatos y pendiente de publicar más obras relacionadas con el subgénero.
También le encanta la mitología nórdica y la sociedad vikinga. Aunque no rehúye de un found footage o una trama paranormal, se siente más cómodo entre cuchillos y máscaras, llegando a entrevistar a directores o desarrolladores de terror.
Combina la escritura con su afición por los pódcast, dirigiendo El videoclub de Woodsbhorror, dedicado al slasher, y No dejes de grabar, dedicado al found footage.
En su currículo como redactor figuran textos únicos en España, como Halloween: origen de la fiesta y de donde viene el truco o trato, curiosidades, historia y evolución; Black Cat Cafe: la historia del bar de San Francisco donde siempre era Halloween; «Truco o Trato: Terror en Halloween» (2007): Una película indispensable para la fiesta de Todos los Santos; Alan Wake 2 tras la narrativa: la inspiración del escritor o Análisis a Until Dawn: repaso a sus influencias slasher.
También le encanta la mitología nórdica y la sociedad vikinga. Aunque no rehúye de un found footage o una trama paranormal, se siente más cómodo entre cuchillos y máscaras, llegando a entrevistar a directores o desarrolladores de terror.
Combina la escritura con su afición por los pódcast, dirigiendo El videoclub de Woodsbhorror, dedicado al slasher, y No dejes de grabar, dedicado al found footage.
En su currículo como redactor figuran textos únicos en España, como Halloween: origen de la fiesta y de donde viene el truco o trato, curiosidades, historia y evolución; Black Cat Cafe: la historia del bar de San Francisco donde siempre era Halloween; «Truco o Trato: Terror en Halloween» (2007): Una película indispensable para la fiesta de Todos los Santos; Alan Wake 2 tras la narrativa: la inspiración del escritor o Análisis a Until Dawn: repaso a sus influencias slasher.
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