[Análisis] Ravenswatch (versión Nintendo Switch)
Un estupendo rogue-lite isométrico ambientado en una fábula oscura

Ravenswatch
Versión analizada: Nintendo Switch
Géneros: RPG de acción
Estudio: Passtech Games
Distribuidor: Nacon
Sistemas: PS5, Steam, Xbox
Idioma: Textos en español
PEGI: 18 años
Los juegos de tipo rogue-lite y sus niveles procedurales (por si os hacéis un lío con el término, tenemos un reportaje aquí) han ganado una enorme popularidad en los últimos años. Títulos como Hades, Dead Cells y Curse of the Dead Gods han ayudado decididamente a ello, estableciendo estándares nuevos de calidad dentro de su género. Ravenswatch, desarrollado por Passtech Games (autores del mencionado Curse of the Dead Gods), intenta sobresalir entre la competitiva oferta rogue-lite con alicientes como un cooperativo online.
Pero ¿lo consigue? Vamos a explicarnos en nuestro análisis de Ravenswatch versión Nintendo Switch. Desde aquí agradecemos a Nacon el código cedido para la realización de esta review.

Érase una vez
Ravenswatch nos transporta a un mundo oscuro inspirado en cuentos y leyendas. Héroes de diferentes mitologías se unen para luchar contra las pesadillas que amenazan su realidad.
Casi como si los cuentos originales de los hermanos Grimm tuvieran lugar en el mundo gótico de Castlevania. Desde Beowulf hasta Gepeto y Caperucita Roja, cada personaje tiene su propia historia y motivaciones, lo que aporta cierto toque de profundidad a la narrativa.
Aunque la historia no es lo más importante a la hora de jugar, se agradece que en modo cooperativo los héroes hablen entre ellos para dar personalidad y carisma. ¡Basta de NPCs!
Este juego me trae recuerdos de las raids con amigos en algún MMO, pero sin farmear como desgraciados
Un frenético rogue-lite
Si te gustó tanto Hades que te lo tatuaste en la pantorrilla, te sentirás como en casa con el sistema de combate de Ravenswatch. En esencia, es un hack & slash con vista isométrica, donde cada héroe tiene habilidades únicas y un estilo de juego muy diferenciado.
Desde el poderoso pero lento Beowulf, hasta el ágil Sun Wukong (si, hoy está hasta en la sopa, y antes solo lo conocíamos o los frikis de la mitología china o los que jugaban al LOL), la variedad de personajes es uno de los puntos fuertes del juego.
El juego mantiene la estructura clásica del género. Exploramos mapas generados de forma procedural, derrotamos enemigos, conseguimos mejoras y nos volvemos más fuertes en cada run. Sin embargo, al igual que en Dead Cells, el éxito depende tanto de la habilidad del jugador como de los power-ups que obtenga.
Esto puede generar algunos problemas de equilibrio en ciertas partidas, ya que una mala selección de mejoras puede hacer que una run se vuelva extremadamente difícil. Si sobrellevas bien la frustración en estas situaciones, no hay problema.

Ciclos noche-día
Ravenswatch sigue a rajatabla las mecánicas de estos RPG fusionados con roguelike. A su combate frenético tendremos habilidades con su respectiva tasa de refresco. Así, deberemos saber cuándo ejecutarlas, cuál puede ser más provechosa de mejorar, etc.
Sin embargo, el juego aporta su propio toque de personalidad dentro de su propuesta conservadora. Y es que han incluido un ciclo de día y noche que impacta tanto en el avatar como en los ítems conseguidos.
De este modo, la noche puede transformar a nuestro personaje en hombre/mujer lobo y recibir objetos específicos en el tramo de medianoche. Como no queremos haceros spoilers, tendréis que descubrir vosotros mismos cuáles son los alter ego de los protagonistas de Ravenswatch…

Cooperativo vs single player
La marca de identidad de Ravenswatch respecto a otros juegos del género es su modo cooperativo en línea para hasta cuatro jugadores. Aquí es donde la experiencia se vuelve aún más divertida. La sinergia entre héroes y la posibilidad de planear estrategias en equipo añade una capa de profundidad que no tiene Hades, por ejemplo.
Además y como ya he comentado, la interacción entre los personajes en el modo cooperativo, con diálogos ingeniosos y bien escritos, aporta un toque de frescura a la experiencia.
Como nota negativa, quizá esté demasiado enfocado al cooperativo, pues avanzar en solitario se hace pronto realmente complicado. Uno de los motivos no es solo que, con más jugadores la dificultad de abordar a los jefes y a los enemigos se reparte, como es lógico. Se debe, sobre todo, al limitado número de continuaciones, que aquí adoptan la forma de plumas de cuervo. Con más jugadores hacen falta menos.
Pero en single player se gastan muy rápidamente. Y, por tanto, tienes muchísimas más probabilidades de perder todas las bonificaciones acumuladas y tener que empezar de cero.

Diseño artístico
Visualmente, Ravenswatch apuesta por un estilo cel-shading, que recuerda a juegos como Darkest Dungeon 2 o League of Legends (salvando las distancias, ya que Ravenswatch no te hundirá la vida poco a poco).
La estética oscura y detallada encaja perfectamente con el tono del juego. Cada personaje está diseñado con una identidad visual única y llamativa. Su estilo comiquero le sienta de fábula, nunca mejor dicho.
¿Merece la pena Ravenswatch para Nintendo Switch?
La primera nota negativa de esta versión la encuentro en los tiempos de carga. Pueden resultar algo largos debido a la regeneración constante del mundo.
Por otro lado, el tamaño de los subtítulos en la pantalla portátil de Switch es quizá menor de lo que debería y complica un poco la lectura.
Y, por lo demás, pocas pegas se le pueden poner tanto a la conversión como al juego en sí. Ravenswatch es una excelente adición a tu biblioteca de juegos. Tiene nueve héroes diferenciados entre sí, jugabilidad variada y un mínimo de 25-30 horas por delante para su campaña.
Su apuesta tan decidida por el cooperativo ha desbalanceado la experiencia, y es algo que deberás tener en cuenta si no te gusta jugar online. Si no es tu caso y disfrutas de la acción cooperativa, tienes un roguelite de lo más recomendable.
Resumen

Lo mejor
Gráficos con un atractivo cel-shading
Jugabilidad sólida y variada con 9 héroes diferentes
Modo cooperativo en línea bien implementado
Interacciones divertidas entre los personajes
Lo peor
Tiempos de carga algo largos debido a la generación procedural
La dificultad no está equilibrada en single player
Redacción: Eduardo Sánchez
Soy Edu, aunque en internet me conocen como Midlhon. Me apasionan los RPG de fantasía (cómo no podía ser de otra manera, una vez al año mínimo tengo que volver a mi hogar, a Skyrim). Pero a veces no puedo resistirme a la acción frenética y al caos controlado que ofrecen los juegos de acción, o de aventuras. Es verdad que cuando un juego tiene diversión para rato, un platino extenso y todo tipo de objetivos, mi yo completista se vuelve loco y se sumerge en Read Dead Redemption 2, The Witcher 3, AC Odissey o, salvando las distancias, Elden Ring.